Incluso en los textos de los
antropólogos más académicos y menos polemistas que podemos
consultar aparecen ciertas estimaciones sobre el tiempo que los
miembros de las tribus forrajeras dedicaban a las tareas de
subsistencia - lo que hoy llamaríamos trabajo - y los resultados de
esas aproximaciones son, traduciendo sobre la marcha la expresión
inglesa, comida para el pensamiento. Kottak1,
por ejemplo, calcula la dedicación de algunas tribus forrajeras -
que aún perviven en África central - en una horquilla que oscila de
las doce a las diecinueve horas por semana.
Si tiramos de este hilo
Naredo puede darnos algunas pistas: el capítulo 7 de sus Raíces
económicas del deterioro ecológico y social2
está íntegramente dedicado al concepto del trabajo y su relación
con la producción. Aquí encontramos algunos datos inquietantes. En
los dominios de la Atenas triunfante, los ciudadanos libres se
libraban de las obligaciones terrenales mientras que en el
hiperdesarrollado occidente contemporáneo cada uno de nosotros
utiliza - de media - la energía equivalente al trabajo de cuarenta
personas.
Si a esto le sumamos
los menores de edad que cosen nuestros zapatos en China, India o
Bangladés, los subsaharianos que ven sus recursos naturales huir
hacia Europa y América del Norte y los hispanoamericanos que
acarrean mercancias en los polígonos industriales y nos traen la
pizza a domicilio - tareas a las que los europeos no nos dedicaríamos
bajo ningún concepto - ¿cuántos esclavos necesitamos para
satisfacer nuestras expectativas vitales?
Un último dato, quizá
el más inquietante: toda esta legión de esclavos no nos permite
vivir despreocupados de las necesidades materiales, sino todo lo
contrario, puesto que, siguiendo una vez más a Naredo, cualquier
trabajador de hoy día tiene que trabajar más días al año que los
siervos de la Edad Media.
1Kottak,
Conrad. Antropología Cultural. Madrid: Mc Graw
Hill, 2002
2Naredo,
José Manuel. Raíces económicas del deterioro ecológico y
social. Madrid: Siglo XXI
Editores, 2007.
No hay comentarios:
Publicar un comentario